jueves, diciembre 06, 2007

Nostalgia de lo sencillo

Una vez más piensa en el pasado, en lo sencillas que eran las cosas en el pueblo. Recuerda a la abuela contando un cuento al calor del fogón antes de dormir; un cuento sobre un granjero pobre que al no poder alimentar a sus hijos los dejó dentro del bosque para no verlos morir de hambre. Pero en la ciudad no hay bosques, a lo mucho parques o jardines, y avenidas, montones de avenidas y calles sin fin; gente por todos lados, perros y autos. No hay lugar donde dejarles sin que la seguridad social no acabe regresándolos, sin que algún vecino avise a la policía, o a los noticieros. Y siempre está la terrible amenaza de los tratantes de órganos y de blancas. Una vez más piensa en el pasado, en lo sencillo que serían las cosas en el pueblo, y suspira.